El sector naval de la comarca de Vigo está atravesando uno de los momentos más críticos de su historia. Barreras y Vulcano, los dos grandes constructores navales de la ría, llevan tiempo con sus gradas vacías. En las próximas semanas se juegan su futuro en diferentes campos de juego.
"Si Pymar no se adhiere al convenio iremos a la liquidación y 1.600 trabajadores se verán perjudicados"
FARO DE VIGO, 18 Ene. (Vigo).- El astillero de Teis necesita la adhesión de sus acreedores al concurso. Su supervivencia depende de que
–Asime demanda que se aparte de la gestión de los astilleros en concurso de acreedores a los directivos que llevaron a las empresas a esa situación. ¿Qué le ha parecido a usted esta exigencia de la patronal del metal?
–Hay mucho nerviosismo en el sector en estos momentos. La falta de carga de trabajo provoca una preocupación lógica en todos, pero más allá no le doy mayor importancia a esa sugerencia. Asime tiene que saber que esas decisiones corresponden a los accionistas y administradores de la empresa, máxime en nuestra situación concursal y en Vulcano estamos trabajando entre todos para salir de esta situación.
–¿Tienen los directivos la confianza de los accionistas del astillero?
–Hasta ahora han mantenido su confianza en nosotros y los directivos de Vulcano nos sentimos con la confianza plena de nuestros accionistas.
–El concurso de acreedores va a ser definitivo para el futuro del astillero, ¿qué expectativas tiene de que Pymar se adhiera al mismo?
–Tenemos un plazo ya marcado: el próximo 13 de febrero como límite. Estamos recibiendo ya adhesiones de nuestros contratistas y proveedores pero la decisión determinante va a ser la de Pymar.
–¿En qué basa la posibilidad de que Pymar acepte finalmente el concurso?
–Pymar es una sociedad que nace para fomentar la construcción naval en España. En consecuencia, está dentro de sus objetivos el apoyo a los astilleros, que son sus accionistas. Vulcano es accionista y consejero de Pymar y la evaluación que se debe hacer sobre el sector de la ría de Vigo es que es necesario el mantenimiento de todos los astilleros que son los que dan trabajo a una industria naval muy potente.
–¿Puede que los otros astilleros socios de Pymar no vean con buenos ojos la adhesión al convenio?
–La decisión de Pymar no puede ser otra más que apoyar a Vulcano, porque los astilleros de la ría de Vigo somos más complementarios que competidores. Nuestro mercado es global, a nivel mundial, y cada uno tenemos nuestra especialización por segmentos de buques. El mantenimiento de un astillero es bueno para los demás porque genera masa crítica y esto es fundamental para la viabilidad del sector en su conjunto.
–¿En el caso que la respuesta de Pymar fuese negativa?.
–¿A cuánta gente podría arrastrar la liquidación del Vulcano a parte de la actual plantilla?
–Estaríamos hablando de unos 1.600 trabajadores, contando con los de las industrias auxiliares que trabajan fuera y dentro del astillero.
-¿De qué manera se podrá parar la sangría de empleo en el naval de comarca viguesa?
–Los ERE en el naval no desaparecerán hasta que Barreras y Vulcano vuelvan a construir buques. Estos dos astilleros, que se encuentran en concurso de acreedores, representan prácticamente el 50% de la construcción naval en la ría de Vigo. La industria auxiliar, que es donde reside la fuerza de trabajo del sector, se ha ido redimensionando, fortaleciendo y creciendo precisamente por la actividad del todo el sector, particularmente por Barreras y Vulcano. Mientras no podamos poner los contratos en vigor, los excedentes de empleos van a seguir ahí.
–Asime propone que se subvencionen solo a las empresas que sean viables, ¿está de acuerdo?
–Por supuesto, le demostraría que Vulcano es una empresa viable.
–¿Cuál es el gran problema de fondo que ha llevado a los grandes astilleros de Vigo a esta situación?
–En nuestro caso el origen se debe, sin duda, a la idea que teníamos de que era posible construir barcos en Factorías Juliana de Gijón, lo que se demostró que era una idea absolutamente desacertada. Como consecuencia de aquello tuvimos cancelaciones de buques que provocaron unos daños tremendos, con costes elevadísimos. Finalmente, la entrada en liquidación de Factorías Juliana tuvo dos consecuencias. La primera, las pérdidas registradas por Vulcano por encima de los 100 millones de euros y, por otro lado, con la liquidación de Juliana, se perdió la posibilidad de construir el buque 535 que no se pudo traer al Vulcano.
–¿Qué parte de culpa tiene la suspensión del tax lease en la actual situación?
–El tax lease es una herramienta financiero-fiscal que nos iguala al resto de astilleros europeos en la contratación. Es fundamental para contratar, lo que ahora no podemos hacer. Todas las construcciones actuales se basan en contratos anteriores a la suspensión del régimen del tax lease. El tax lease no es culpable de la situación actual, pero sin el tax lease no saldremos de ella.
–¿En qué momentos se encuentran las negociaciones entre el gobierno español y
–Las noticias son positivas. Esperamos que en un plazo corto podamos contar con el nuevo tax lease.
–¿A pesar de que el tax lease sigue paralizado se sigue manteniendo la labor comercial?
–No hemos dejado en ningún momento de intentar conseguir nuevos contratos. En estos momentos están directivos de Vulcano en Noruega con importantes expectativas de nuevos contratos que dependen ahora del concurso y del tax lease.