Navantia construye en la ría de Ferrol dos gigantes navales para la Armada de Australia y se ocupa de la transferencia de tecnología y de la asistencia técnica en el país del programa de construcción de tres destructores, basadas en las fragatas F-100 españolas. Es, pues, un cliente de referencia para el Ministerio de Defensa del país, que firmará este otoño un pequeño contrato por el que los astilleros de la ría ferrolana se ocuparán de la construcción de cinco bloques para el segundo destructor que se está fabricando en diversas localidades australianas. Ya se ha ocupado, no obstante, de la elaboración de otras tres secciones que, por su complejidad, la Armada decidió encargar a las plantas públicas de la ría.

El astillero presentó una oferta para ocuparse de su mantenimiento
 
LA VOZ DE GALICIA, 02 Sep. (Ferrol).- Navantia pretende exprimir al máximo una relación con la Marina de las Antípodas que comenzó hace cuatro años, cuando se firmó el contrato para la construcción de los dos megabuques y el diseño de los tres destructores. Por ello ha presentado a la Marina australiana una oferta para el apoyo al ciclo de vida de estos navíos, sobre la que esa Armada podría pronunciarse este mismo mes.
 
La pretensión de la compañía que dirige Luís Cacho es la de consolidar la relación comercial para mantenerse de forma estrecha durante varios años, aunque por el momento, como los barcos aún no están terminados, no se ha fijado un plazo concreto. De fructificar el encargo, Navantia se ocuparía del mantenimiento de los buques, llevando a cabo todas las actualizaciones de sistemas y equipos que permitirían a los navíos mantenerse a la vanguardia de los de su clase. Al mismo tiempo se ocuparía del incremento de las capacidades operativas de los barcos anfibios -que están basados en el Juan Carlos I de la Armada española- y los destructores, incorporando las últimas generaciones en equipamiento.
 
Nueva línea
 
El apoyo al ciclo de vida es una nueva línea de negocio que ha decidido potenciar Navantia en un momento en que el mercado de la construcción de barcos militares se encuentra en descenso debido a los recortes en los presupuestos de Defensa por la crisis económica. Navantia también aspira a ocuparse del ciclo de vida de las cinco fragatas que fabricó para Noruega.
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