El Clúster Marítimo de Cantabria y el Clúster de las Illes Balears plantean convertir a Cantabria en un laboratorio experimental para la generación de energía renovable a partir de la fuerza de las olas del mar. Una propuesta que se fundamenta en el desarrollo de una prueba piloto del proyecto ROE (Renewable Ocean Energy). Esta iniciativa pionera, impulsada por el consorcio del clúster balear, las compañías ROE y Sunwa Technologies, y la Universidad de las Illes Balears, pretende generar energía renovable procedente de la fuerza undimotriz de las olas del mar.
La posibilidad de realizar una experiencia piloto del proyecto ROE en Cantabria se ha analizado en profundidad durante la jornada “Reducción de los costes energéticos por la aplicación de las nuevas tecnologías”. La jornada ha contado con la más alta representación de los dos clústeres sectoriales y de ambas Administraciones autonómicas.
“Cantabria también está tomando un camino que apuesta firmemente por las energías renovables innovadoras para alcanzar el objetivo de la Comisión Europea que aboga por una Europa climáticamente neutra en 2050.” ha asegurado Juan Luis Sánchez. En este contexto, el presidente de MarCA ha destacado que “El mar Cantábrico es un emplazamiento idóneo para la generación de energía undimotriz y tenemos que apostar por ello”. “La descarbonización es un objetivo con el cual está plenamente comprometido el sector marítimo, con la recientemente creada Plataforma de la Economía Azul de Cantabria como ejemplo de ello”.
Además, Sánchez ha relacionado alguno de los proyectos que ya se están llevando a cabo dentro de la comunidad en el ámbito de las energías alternativas, como Green Hidrógeno Cantabria. “La energía a través de las olas es un refuerzo más a las capacidades de nuestra comunidad para ser sostenible y eficiente” concluyó.
Iolanda Piedra, presidenta del Clúster de las Illes Balears, ha expuesto el proyecto ROE a los representantes del Gobierno de Cantabria y el Clúster MarCA. Sobre la propuesta, Piedra ha hecho hincapié en que “no supone impacto alguno en el turismo marítimo, ni en el transporte marítimo, la náutica o la pesca”. Esto se debe a que la tecnología estará instalada en los espigones lo cual, asegura, “no causa ninguna modificación en el paisaje ni en la actividad de estos sectores”.
El componente innovador del proyecto ROE se centra en una turbina hidráulica marina, que presenta la capacidad de aprovechar la energía producida por las olas cuando estas rompen contra los espigones, generando una electricidad media de 15 Kw/h a 25 Kw/h por unidad. Los técnicos responsables del desarrollo de esta iniciativa afirman que, mediante la energía del proyecto, se puede producir la misma cantidad de energía renovable en 100m2 que en 1.200 m2 de energía fotovoltaica.
La propuesta, impulsada en colaboración con el Clúster de las Illes Balears, entronca con la línea de actuación de Green Deal marcada en el Plan Estratégico 2021 – 2024 del Clúster MarCA. Esta línea tiene por objetivo impulsar el uso de fuentes de energías alternativas y renovables en la industria marítima de la región para lograr un consumo energético más limpio y fomentar la sostenibilidad medioambiental.