Las aves son una buena matriz para monitorear la contaminación ambiental local ya que la carga corporal contaminante refleja los niveles en el medio ambiente. Se sabe que las aves incorporan metales en sus plumas y, en particular, las aves hembras también tienen la capacidad de acumular contaminantes a través de la dieta y luego transferirlos a los huevos
  • Las gaviotas en Vigo pueden estar sufriendo algunos efectos tóxicos debido a las concentraciones encontradas
  • El estudio respalda el uso de huevos de gaviota patiamarilla como bioindicador de contaminación capaz de diferenciar el nivel de contaminación incluso en áreas geográficamente cercanas
  • El estudio será publicado en el volumen de noviembre de la revista científica “Enviromental Research” perteneciente a la prestigiosa editorial Elsevier Emplazamientos de muestreo situados en la Ría de Vigo

Los huevos de aves marinas han demostrado ser un excelente sistema de seguimiento, siendo útil para estudiar tanto la distribución espacial como la evolución temporal de los contaminantes en el medio marino. La concentración de contaminantes en los huevos de aves marinas refleja la carga corporal en adultos. La carga de organoclorados y mercurio en los huevos de aves marinas incluso ha sido reconocida como un calificador ambiental por las Comisiones de Oslo y París, siendo la base para la formulación de algunos de los Objetivos de Calidad Ecológica (EcoQO) que proporcionan objetivos operativos e indicadores para respaldar las evaluaciones de la salud del ecosistema y ayudar a dirigir las acciones de gestión (Comisión OSPAR, 2010).

Las investigadoras Lucía Viñas, Victoria Besada y Begoña Pérez-Fernández del Centro Oceanográfico de Vigo junto a Antonio Bode del Centro Oceanográfico de A Coruña han investigado la concentración de diferentes contaminantes orgánicos persistentes (POPs, incluidos compuestos clorados y bromados) y metales traza y metaloides (As, Cd, Cu, Cr, Pb, Hg, Ni y Zn) en huevos de dos colonias de gaviotas patiamarillas, Larus michahellis.

Las dos colonias están establecidas en la Ría de Vigo con una distancia entre ellas de tan solo 10 km, una en la localidad de Vigo (ciudad portuaria) y la otra en las Islas Cíes en un Parque Natural y Área Marina Protegida -MPA- (sin antropogénicos conocidos).

En el estudio se observaron diferencias estadísticamente significativas para las dos colonias para Hg, la suma de 7 CB, la suma de DDT y la suma de 9 PBDE, con valores que podrían estar causando algunos efectos tóxicos en el área de la colonia de mayor influencia antropogénica.

La investigación apunta a una dieta más amplia de la colonia Cíes en comparación con la de Vigo gracias al cálculo del nicho isotópico estimado en base a δ15N y δ13C.

El estudio respalda el uso de huevos de gaviota patiamarilla como bioindicador de contaminación capaz de diferenciar el nivel de contaminación incluso en áreas geográficamente cercanas.

El estudio será publicado en el volumen de noviembre de la revista científica “Enviromental Research” perteneciente a la prestigiosa editorial Elsevier. El artículo estará disponible de forma gratuita hasta el 29 de septiembre en el siguiente enlace: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0013935120309233

Referencia bibliográfica: Viñas, L., Besada, V., Pérez-Fernández, B., & Bode, A. (2020). Yellow-legged gull eggs (Larus michahellis) as persistent organic pollutants and trace metal bioindicator for two nearby areas with different human impact. Environmental Research, 190, 110026. https://doi.org/10.1016/j.envres.2020.110026

Fuente: ieo
http://www.ieo.es/es/

Be Sociable, Share!