El hasta entonces buque insignia de la Armada española –sustituido ahora por el Juan Carlos I– llegó al puerto gallego el 8 de febrero de 2013 con una dotación ya reducida de 220 marinos que, posteriormente, quedaría en una decena para realizar las labores de custodia y vigilancia durante las 24 horas del día.
Después de que se barajase la posibilidad de comercializarlo a una Marina de otro país -delegaciones militares de algunas naciones incluso llegaron a recorrer su interior-, esta opción se da ya por descartada, informó el diario La Voz de Galicia.
El buque se encuentra en un muelle de Navantia, bajo tutela del Arsenal, para su desguace.
Según el diario local, no hay todavía fecha definitiva para su conversión en chatarra, pero todo apunta a que será rn breve. Algunas fuentes afirman que la convocatoria de la subasta podría producirse este verano, con lo que el portaaeronaves podría ser retirado del Arsenal antes de que finalice este año 2015.
Las fragatas
Además, recientemente se ha producido por parte de la Armada una sucesión de convocatorias de pujas para el desguace de otras unidades, por lo que todo apunta a que el Príncipe de Asturias será el siguiente.
Un punto de inflexión en este proceso tuvo lugar a finales del pasado mes de febrero,cuando el Ministerio de Defensa abrió de forma oficial la convocatoria para la conversión en chatarra de las fragatas Extremadura y Asturias, dadas de baja respectivamente en septiembre de 2006 y junio de 2009.
Desde la mencionada cartera se tasó en casi 560.000 euros el precio de salida para cada uno de esos navíos, incrementado su precio con respecto a la anterior unidad de similares características que ha sido subastada. La Baleares salió por un precio de 350.000 euros.
