Pymar, prefiere ser cauto y no echar las campanas al vuelo sobre los últimos datos aportados por Gernaval
EL COMERCIO, 20 Ago. (Gijón).- El primer semestre del año fue muy bueno para la industria naval del Principado. Pese a la recesión económica y la crisis por la prohibición europea del denominado ‘tax lease’, el polémico sistema de bonificaciones fiscales que se aplicaba en España, los astilleros asturianos firmaron más contratos que nunca y acumularon una cartera de pedidos de 38 buques, que supone 145.300 toneladas contratadas (CGT), más que ninguna otra comunidad autónoma.
El récord quedó reflejado en el informe que cada trimestre publica la Gerencia del Sector Naval (Gernaval), el organismo del Ministerio de Industria que estudia el comportamiento de la industria naval española. Al cierre del primer semestre, Gernaval situó a los astilleros asturianos en el primer puesto del ranking nacional de pedidos, por delante del País Vasco y Galicia, las comunidades que tradicionalmente siempre coparon los principales pedidos del naval.
La industria asturiana del naval se está defendiendo bien en estos momentos difíciles. Este buen comportamiento se debe, sobre todo, al tirón que ha dado en los últimos años el grupo Armón, con instalaciones en Navia y Vigo. En 2011, el grupo de Navia se hizo con el antiguo astillero de El Natahoyo, Juliana Constructora Gijonesa, al que rescató de la quiebra en el proceso concursal al que lo abocó en el año 2009 la empresa gallega Vulcano. Esta operación le permitió un importante crecimiento con contratos procedentes del exterior y más capacidad para el futuro.
Pero ocupar el primer puesto nacional de la industria naval en estos momentos podría ser temporal. No es irreal porque los astilleros asturianos tienen carga de trabajo suficiente para los próximos dos años pero cuando el sector se regularice tras el conflicto del ‘tax lease’ posiblemente regrese al segundo o tercer puesto del ranking que le corresponde de forma natural.
El presidente de Pequeños y Medianos Astilleros en Reconversión (Pymar), la patronal del sector, y de Astilleros Gondán, Álvaro Platero, también prefiere ser cauto y no echar las campanas al vuelo sobre los últimos datos aportados por Gernaval. «Con la que está cayendo no podemos quejarnos, pero ocupar el primer puesto del ranking de pedidos en España más bien es por lo poco que están contratando los astilleros de otras comunidades que por lo mucho que contratamos nosotros», señaló al ser preguntado por el fenómeno que sitúa a Asturias al frente del timón del naval. Desde que en 2011 se produjo la prohibición europea del ‘tax lease’, la empresa naval gallega cayó en picado y la del País Vasco se mantuvo a duras penas.
Sea como sea y aunque la mayor parte de la cartera esté compuesta de buques pequeños, los astilleros asturianos no paran de firmar contratos. En el último trimestre, entre abril y junio, las empresas asturianas contrataron la construcción de nueve buques, cuatro más que el resto de los astilleros juntos. Cuatro de ellos fueron para Armón-Navia y tres para Gijón, así como dos buques auxiliares de pesca a cargo del Astillero Ría de Avilés, una instalación que en los últimos años se dedicó a la reparación y que ahora también contrata la construcción de buques. En el último trimestre, el resto de los astilleros españoles únicamente firmaron cinco contratos para la construcción de buques y ninguno de más de siete mil toneladas.
La cartera de pedidos de los astilleros asturianos está compuesta mayoritariamente por buques de pequeño porte, entre 1.800 toneladas y 7.800 toneladas. Armón tiene una cartera de pedidos de 20 buques en Navia, la mayor parte remolcadores para el canal de Panamá. En Gijón el grupo de Navia tiene nueve buques, todos ellos atuneros y en Vigo, cinco. Gondán, por su parte, tiene una cartera de pedidos de dos buques.
