Se los denomina ‘Terrorex’, que suena a nombre de ansiolítico, pero es la abreviatura de ‘Ejercicio antiterrorista’ en código OTAN. Unos entrenamientos que, durante las últimas semanas, se han tornado práctica habitual entre los buques de
Buques de guerra se ejercitan en tácticas defensivas para adiestrar a sus tripulaciones en aguas gaditanas y el Mar del Alborán
DIARO DE JEREZ, 16 Ago. (Cádiz).- La implementación de los ‘Terrorex’ se ha producido tras las informaciones que, tanto el Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (CIFAS), como el propio Centro Nacional de Inteligencia (CNI); han recibido de agentes sobre el terreno y de servicios aliados. Los adiestramientos se desarrollan aprovechando tránsitos y misiones rutinarias de los navíos militares españoles y se están concentrando el área naval entre
El último ejercicio conocido se realizaba en aguas de
Estos entrenamientos pasan desapercibido para la navegación civil, pues durante ellos no suele dispararse, sino que se busca asegurar un tiempo mínimo de respuesta, para contener y repeler el ataque. Se trata, en definitiva, de adiestrar a los operadores de los radares del CIC (Centro de Información y Combate) en cada navío, a fin de detectar la amenaza con el margen necesario para que artilleros, ametralladores o, en su caso, fusileros integrantes de la fuerza de protección de un buque de guerra; se encuentren en disposición de abrir fuego contra una lancha o varias, que se aproximen a gran velocidad.
Por causa de este último requerimiento, el papel de “agresores” suele ser desempeñado por
Esta es la segunda ocasión que los servicios de espionaje españoles alertan del riesgo de un ataque con lanchas ‘suicidas’ a buques militares. Ya en 2003, analistas del CNI elevaron al Gobierno un informe, avisando de posibles atentados contra navíos militares y civiles, en el área comprendida entre el Golfo de Cádiz y el Mar de Alborán, con especial riesgo de incidencia en la zona del Estrecho de Gibraltar.
Sin embargo, en los últimos meses, los citados órganos de espionaje han detectado ciertos factores esenciales, que ha elevado las medidas de alerta en las armadas de
El primero es un incremento en la actividad de la denominada Al-Quada para el Magreb Islámico (AQMI), la cual actúa estaría actuando en la costa septentrional y noroccidental africana. En esos ámbitos la organización terrorista realiza una notoria captación de adeptos para su causa, entre personas vinculadas a actividades delictivas.
En concreto, los informes señalan que AQMI habría distribuido consignas para intensificar dos tipos de acciones: uno de estas actividades sería el secuestro de cooperantes españoles de oenegés, que trabajan en la zona del Sahel. Por experiencias precedentes, los integristas han comprobado que España pagó por el rescate de cada uno de sus nacionales secuestrados, sumas que oscilan entre 1,3 y 1 millón de euros por cada persona liberada.
Los terroristas consideran esa cruel actividad una importante fuente de financiación, a la cual no están dispuestos a renunciar, aunque pierdan parte de la suma final de cada rescate en ‘comisiones’ a los diversos implicados en el desarrollo de los secuestros. Estos suelen contar durante el proceso con intervención de bandas de contrabandistas y traficantes de esclavos, o de simples cuadrilleros dedicados al pillaje.
Los servicios de inteligencia consideran también que AQMI ha logrado ganar para su causa en Marruecos, a personas vinculadas al narcotráfico a través del Estrecho de Gibraltar. Individuos que, por otra parte, estarían tratando de adquirir material susceptible de uso terrorista en medios náuticos.
Existe, empero, otro elemento que ha disparado las alarmas entre las marinas de guerra de
Según informes del CNI y otros servicios de inteligencia europeos, los integristas de Al-Qada en el Magreb Islámico tratan adquirir una partida indeterminada de semtex, un explosivo plástico moldeable, compuesto a su vez por otros dos diferentes: la ciclonita y la pentrita. Es difícil precisar la cantidad exacta que negocia AQMI, pues dicho material se fabrica en tabletas, cuyo peso varía de los 250 a los
En paralelo a la detección de estas maquinaciones, el CIFAS también ha recibido informaciones de