El Clúster Marítimo Español (CME) celebra un nuevo Desayuno con el Clúster, donde el director general de Marina Mercante, Gustavo Santana Hernández, explica los beneficios de la nueva Estrategia Marítima de España sobre la industria de construcción naval, la innovación tecnológica, las nuevas energías e incluso sobre la náutica de recreo; asegurando que la estrategia tendrá éxito si cuenta con el compromiso de todo el sector para desarrollar de manera ordenada y planificada los objetivos marcados. “Que no os quepa duda de que la Dirección General de la Marina Mercante, con el respaldo del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible y con vuestro empuje va a impulsar la Estrategia Marítima para desarrollar un marco normativo e institucional que permita que las industrias marítimas españolas crezcan y España aproveche todo el potencial de generación de empleo, tecnología y conocimiento de nuestro sector marítimo”, explica Santana.
El presidente del CME, Javier Garat, coincide con el invitado en resaltar el potencial de la economía azul y la necesidad de promocionarla. También reclama el interés de esa estrategia nacional, así como otras reivindicaciones sectoriales que deben ser tenidas en cuenta por parte de los poderes públicos, como el apoyo, sobre todo financiero, en la transición energética hacia la descarbonización, el impulso de la competitividad de la flota de bandera española o la creación de un ministerio del mar que aglutine todas las competencias de la economía azul, entre otros asuntos.
Líneas estratégicas
Santana Hernández ha centrado su intervención en desgranar las claves de los siete ejes estratégicos de actuación en los que se desarrollará la nueva estrategia: medioambiente, digitalización, empleo, Administración, flota de bandera, náutica de recreo y sistema portuario. Previamente pone en valor al sector marítimo, especialmente el transporte, aseverando que es, más que nunca, estratégico para la economía de nuestro país. La economía española genera una intensa demanda de transporte marítimo de mercancías y de pasajeros, los ambiciosos objetivos de descarbonización fijados por la OMI y la UE y sus normativas asociadas requerirán un importante proceso de adaptación de la flota mercante y el despliegue en España de la eólica marina representa una oportunidad de desarrollo sectorial muy notable. Además, el auge del sector marítimo, la transición energética y la industria 4.0 favorecen el impulso de las tecnologías de futuro, la investigación y la innovación dentro de la cadena de valor marítima y el sector de la náutica de recreo tiene un gran potencial de crecimiento.
Y el transporte marítimo es, precisamente, uno de los grandes protagonistas del primer eje de la estrategia marítima española, pues si bien es el medio de transporte de mercancías más eficiente, su descarbonización es muy complicada, por lo que el eje de la transición energética constituye un gran desafío, aunque “lo vemos más como una oportunidad”, afirma Santana. Oportunidad para aprovechar las nuevas tecnologías y la capacidad de innovación de nuestra industria, que se enmarca en otro de los ejes estratégicos, el de digitalización. Este incluye el estímulo de la cultura de innovación, la digitalización de la Administración, la mejora de la ciberseguridad y la contribución al desarrollo tecnológico. En esta línea, el director general apuesta por las energías renovables marinas, concretamente la eólica, como una de las piezas fundamentales dentro de este eje de actuación.
Dentro del ámbito de la descarbonización, Santana anticipa que tras este “examen de conciencia” al repasar las diferentes problemáticas del sector, se han puesto manos a la obra y dice que el proceso de descarbonización requiere trazar un plan que se está elaborando de forma simultánea a la estrategia marítima, pues no hay tiempo que perder. También ha destacado el desarrollo de los corredores verdes marítimos, como parte de los objetivos de este eje estratégico medioambiental.
En lo que respecta a la problemática con la flota de bandera española, califica de mala noticia la reducción de la misma. Gustavo Santana afirma que “el Registro Especial de Canarias no es atractivo y necesita un impulso para competir con otros puertos europeos”, así como conseguir un sector robusto. Para lograrlo, se está trabajando en un estudio específico sobre este eje estratégico concreto.
Otro punto destacado de la intervención del Director General de Marina Mercante ha sido el de la Administración, no en vano el Clúster siempre ha hecho hincapié en la necesidad de un organismo aglutinador capaz de coordinar todas las competencias en materia de economía azul. Competencias que, según el propio Santana Hernández, están actualmente repartidas en once ministerios, lo que le lleva a reivindicar una coordinación institucional y afirmar que la estrategia marítima española debe ser una estrategia que debe ser de todos, no solo de Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible o de la Dirección General de Marina Mercante; de esta manera anuncia el acuerdo para crear un comité asesor marítimo donde poder debatir sobre los asuntos que atañen a las diferentes actividades de la economía azul y compartirlo con el resto de la Administración.
Por otra parte, el director general no quiso dar la impresión de que la estrategia es algo cerrado, sino abierto a la participación de todos los agentes sector marítimo, asegurando que su éxito depende del compromiso de todo el sector.
