A primeros de septiembre tuvo lugar la presentación del Trofeo Oceánico Elcano, en el Castillo de Santiago de Sanlúcar (Cádiz), coincidiendo con la culminación de la celebración del 500 aniversario de la primera vuelta al mundo de Juan Sebastián de Elcano. El acto contó con la participación del Clúster Marítimo Español, representado por el socio Miguel Ángel Lamet, que también representaba a Comismar y el Anuario Marítimo Español.
El galardón, que pretende unir pasado, presente y futuro de la gesta de Elcano, servirá sin duda a perpetuar su recuerdo y el de su tripulación, que hace justo 500 años cerraron la vuelta al mundo, demostrando con su hazaña empíricamente, por vez primera, su redondez y dimensiones reales para siempre. También servirá para demostrar al mundo la importancia de nuestro país, Andalucia, Sanlúcar y la propia Cádiz, así como su aportación al conocimiento y desarrollo del mismo.
Este nuevo desafío náutico arranca de la mano de OpenSea, con el apoyo de la Asociación 500 Años 1ª Circunnavegación a Vela, y el respaldo institucional de la Junta de Andalucía, el Ministerio de Cultura y Deporte, la Diputación de Cádiz y la Armada. Durante la presentación intervinieron diferentes representantes de la Administración, el mundo del deporte, la televisión y la cultura, así como los promotores y SM el Rey Felipe VI, que remitió unas palabras en apoyo a la iniciativa. La clausura corrió a cargo del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla.
La travesía
El Trofeo Oceánico JS Elcano reconocerá a todas las embarcaciones y tripulaciones que completen la circunnavegación hacia el oeste, siguiendo la ruta oficial. Comenzará en la localidad de Sanlúcar de Barrameda, y el paso de Sudamérica podrá realizarse a mar abierto, por el Cabo de Hornos (Chile) o por el Estrecho de Magallanes. Desde allí se cruzará todo el océano Pacífico, hasta el estrecho de Torres (al norte de Australia) y el océano Índico, hasta el Cabo de Buena Esperanza (Sudáfrica). La remontada atlántica llegará hasta la isla de Flores, al noroeste de las Azores (Portugal), último hito de paso obligado, antes de la llegada a línea de meta, de nuevo en Sanlúcar de Barrameda.