La Escuela Superior de Ingenieros Navales de Madrid acogió ayer un nuevo Encuentro con la Mar, organizado por el Clúster Marítimo Español (CME), que bajo el título de Futuro de la industria pesquera, analizó los retos que tiene este subsector para los próximos años, como el Brexit.
El presidente de honor del CME, Federico Esteve, fue el encargado de presentar y moderar este encuentro, destacando que la pesca es uno de los sectores con mayor aporte en la economía española y en la contribución de generación de empleo. “Es un sector líder en nuestro país, del cual debemos estar muy satisfechos y orgullosos. Esto sitúa a España como primer país europeo, tanto en producción como en valor añadido”. A pesar de ello, Esteve puso sobre la mesa la necesidad de abordar la pesca como un segmento, con unos retos y desafíos a los que se debe hacer frente cuanto antes para lograr su competitividad y desarrollo. En este sentido, destacó como aspecto fundamental la incidencia del Brexit para el replanteamiento y renegociación de la situación de los caladeros. Además resaltó la dificultad para encontrar trabajadores de la mar, para lo que propuso un intercambio de personas entre los distintos segmentos que componen el sector marítimo.
Por otro lado, el presidente de honor hizo saber algunas de las peticiones del CME a la Administración, como son la reducción del IVA en los productos pesqueros, la adopción de una normativa adecuada para los descartes o la contratación de personal cualificado que desarrolle la actividad pesquera en unas condiciones laborales de calidad.
Crecimiento azul para el sector pesquero
José Ignacio Pradas, subdirector general de competitividad y asuntos sociales en la Secretaría General de Pesca del MAPAMA, fue el primero en abrir el debate, haciendo referencia a la importancia que ha cobrado en estos últimos años el denominado “crecimiento azul”, así como los objetivos de desarrollo sostenible del sector pesquero. “El enfoque de crecimiento azul es un enfoque sistémico y amplío, en el cual hay importantes retos reflejados en la estrategia de la UE, pero a los cuales entendemos que deben dársele una perspectiva nacional. Desde el punto de vista de la Secretaría General de Pesca tenemos en cuenta que la pesca juega un papel fundamental en todo lo que sería la economía azul, como segmento tractor que impulsa la competitividad de otros”.
Teniendo en cuenta este concepto y todo lo que conlleva para el sector pesquero, Pradas puntualizó algunas de las propuestas emitidas por la Secretaría General de Pesca, entre las que se encuentran la creación de un Consejo Consultivo del sector pesquero, la puesta en marcha de un mecanismo de financiación eficaz y solvente, el desarrollo de proyectos integrados multisectoriales en 2017-2018, la creación de un sistema de control e inspección pesquera líder, la consecución del 10% de áreas marinas protegidas, el impulso a la acuicultura, la cooperación internacional y la generación de espacios de conocimiento.
Impulso de la competitividad pesquera
A continuación, Javier Garat, secretario general de Cepesca, remarcó la representatividad de la industria pesquera en el conjunto de la sociedad como una de las principales fuentes de alimentación. “La pesca es un sector importante y estratégico en un mundo claramente creciente y que necesita alimentarse saludablemente. Por ello debemos seguir cuidando este recurso, de forma que sirva de fuente alimenticia en el futuro”.
En este sentido, Garat quiso poner de manifiesto que, pese a su gran peso en la dimensión social, en el ámbito económico, la pesca se enfrentarse a una serie de retos como la globalización, la Política Pesquera Común, el Brexit, la escasez de tripulantes, la reducción en el consumo de pescado o la negativa imagen transmitida a la sociedad, que dificultan su correcto desempeño.
En relación a estos retos, el representante de Cepesca indicó algunos de los objetivos que la Confederación considera fundamentales para conseguir una posición más sólida y competitiva respecto de los demás países de la Unión Europea. Entre estos objetivos, recalcó la importancia de que los países europeos adopten los mismos estándares de pesca responsable y sostenible, así como la importancia de dotar de contenido al Registro Especial de Empresas de Buques de Pesca Españoles (RESAE), con bonificaciones similares a las de la marina mercante; dar continuidad a la Operación Atalanta; seguir en la lucha contra la pesca ilegal; la investigación pesquera; la garantía de la seguridad jurídica de las empresas; la aplicación del Convenio 188 de los trabajadores; la puesta en marcha de mecanismos que flexibilicen las cuotas; y, el desembarque de especies de estrangulamiento con un sistema más flexible.
La incidencia del Brexit en la pesca
Seguidamente, con el objetivo de abordar uno de los principales desafíos planteados actualmente en el sector pesquero, Jaime Albors, asociado y solicitor de Inglaterra y Gales de Albors, Galiano & Portales, estuvo presente en este encuentro, dando cuenta de los principales asuntos pesqueros afectados por la puesta en marcha del Brexit, como consecuencia de la salida del Reino Unido de la Unión Europea. “En Reino Unido el sector pesquero ha estado políticamente muy activo. Por ello, a raíz de su salida de la Unión Europea, creo que van a tener que tener en cuenta dos aspectos fundamentales: por un lado el tema de la zona económica exclusiva y, por otro, las libertades comunitarias”.
Atendiendo a estos dos puntos, durante su intervención, Albors puso el foco en la negociación y los acuerdos como medio fundamental para la resolución de los principales problemas legales y económicos que se plantean ante este nuevo escenario, como son la restricción de la flota española en aguas británicas, la libre circulación de personas y bienes, así como la entrada de productos británicos en la Unión Europea. Este último un aspecto clave para llevar a buen puerto la negociación.
Tecnología aplicada
Aportando una visión más tecnológica, Carmelo Zabala, director comercial de Nautical del Grupo Arbulu, dio a conocer las últimas novedades aplicadas al sector pesquero lanzadas por la compañía. A este respecto, reseñó la importancia de diseñar sistemas cada vez más eficientes, que vayan más allá del diseño, que cumplan las cada vez más estrictas normas marcadas y que permitan facilitar la integración de equipos, así como la trazabilidad del proceso pesquero. “Cada vez hay una mayor demanda de necesidades para las que los equipos no están diseñados inicialmente”.
Como muestra de ello, el representante de Nautical mostró una de las últimas apuestas desarrollada por Marine Instruments, marca representada por Grupo Arbulu, el Tunadrone. Se trata de un dispositivo en forma de dron, que permite identificar de forma más precisa el lugar en el que se encuentran las especies objetivos de la pesca que se vaya a desarrollar. Esto permite llevar a cabo de manera más precisa y sostenible una actividad pesquera en la que tan sólo se capturen las especies objetivo propuestas.
La intervención de Zabala, apoyada en ejemplos prácticos que reflejan el nivel de innovación del sector pesquero, mostró a todos los asistentes la mejora de la competitividad que puede ofrecer la tecnología aplicada a la pesca.
Contratación de personal cualificado
Tras Zabala, tomó la palabra Juanjo Barreiro, representante de Ibernor, que durante su turno trató uno de los principales retos del sector: la contratación de personal preparado y cualificado para el desarrollo de la actividad pesquera. Para Barreiro, que fue muy crítico con los actuales estamentos formativos, el principal problema reside en que “el avance imparable de la tecnología requiere ir acompañado de una formación continua para el personal implicado. A ello se le suma la falta de recursos tecnológicos en las aulas y el requerimiento de una formación más técnica”. Según el representante de Ibernor, todo ello puede poner en riesgo la contratación de personal cualificado que sepa hacer frente a la posible producción de accidentes marítimos, debido a la mala interpretación de los datos.
Investigación pesquera
Por último, Pablo Abaunza, subdirector general del IEO, puso de manifiesto la relevancia de los procesos de investigación a la hora de conocer el estado de las especies, así como su desarrollo y evolución. “Hay tres palabras clave en las que la investigación tiene cabida que son la sostenibilidad, la conservación y la seguridad alimentaria”.
Con el fin de poder abordar y tener presencia en estos tres ámbitos, Abaunza explicó algunos de los métodos empleados para llegar a conclusiones fiables y basadas en la experiencia científica, que sirvan posteriormente para el desarrollo de técnicas pesqueras, tecnología e información alimentaria.
