Según ha podido saber NAUCHERglobal, la sede del International Dockworkers Council (IDC) ha recibido numerosas cartas y correos electrónicos de apoyo al modelo de estiba de los puertos españoles. Compañeros de Grecia, Portugal, Estados Unidos, Dinamarca, Chipre, Francia, Reino Unido, Brasil, Argentina, Paraguay, Ecuador, etc. han querido mostrar su respaldo a las acciones que tomen los estibadores. Asimismo, asociaciones y sindicatos como ILWU, ILA o CGT han mostrado su completo soporte.
En este sentido, el mensaje mayoritario de los escritos recibidos hacen clara referencia a un apoyo y puesta a disposición de los trabajadores de decenas de puertos afiliados a IDC a las medidas de presión que puedan tomar los estibadores españoles. Recordar que estas muestras de solidaridad ya se han dado en diferentes ocasiones con conflictos como los de Portugal o Grecia tan solo hace unos meses.
En varias misivas (algunas adjuntas en pdf) que han dirigido algunas de las principales asociaciones de trabajadores portuarios a escala internacional y cuyos destinatarios han sido IDC y la ministra de Fomento, Ana Pastor, se pone de manifiesto la preocupación por la situación española a escala internacional.
Según Harold J. Daggett, presidente de la ILA, las noticias que llegan desde España “supondrían un grave atentado contra la estabilidad laboral de los trabajadores portuarios españoles y, en definitiva, de un sistema de organización de trabajo que ha demostrado su plena validez y vigencia”. La desaparición de las SAGEP provocaría “unos efectos devastadores en los propios puertos españoles y, por ende, en la economía europea”.
Para la ILA “creemos que aún estamos a tiempo de impedir que el clima se deteriore hasta extremos imposibles de reconducir. Únicamente bastaría con que se retome la senda del diálogo con los agentes sociales (…)”. En todo caso, “como organización sindical comprometida con los derechos laborales de los trabajadores, nos reservaremos la potestad de apoyar todas las acciones que sean necesarias para garantiza la estabilidad del sistema español de estiba”.
En esta misma línea, el secretariado de la Fédération Nationale des Ports et Docks de la CGT, con sede en París, ha remitido una traducción de la carta a la ministra Pastor. Por su parte, Robert McEllrath, presidente internacional de la ILWU ha añadido en su correo dirigido a Ana Pastor que “le pedimos que ambas partes reanuden el diálogo y lleguen a un acuerdo justo y equitativo. Como compañeros comprometidos con los derechos laborales de todos los trabajadores, ILWU continuará prestando su apoyo solidario a los trabajadores portuarios españoles en su lucha por un contrato justo, y que se asegure la estabilidad del sistema portuario español”.
Sólo estas tres organizaciones representan a más de 150.000 estibadores repartidos por varios puertos del mundo.
La reunión con Fomento, mañana
Tal como explicó ayer este medio, la reunión entre el ministerio de Fomento y los trabajadores tendrá lugar mañana, a partir de las 10:30 horas, no hoy como ha salido publicado en diferentes plataformas informativas. En este encuentro participarán los máximos representantes de Coordinadora que, precisamente en este momento, están reunidos para conciliar una propuesta conjunta al ministerio que sea alternativa al texto que ha presentado Puertos del Estado a la Comisión Europea.
Según han afirmado a NAUCHERglobal fuentes de Coordinadora –el sindicato que llevará el peso de la negociación- del cónclave de hoy saldrán las propuestas de los trabajadores para conciliar una resolución pactada a la sentencia del tribunal de las Comunidades Europeas de diciembre del pasado año.
Aún así, la tensión que se respira en el ambiente es elevada por cuanto ni trabajadores ni empresas creen acertado que Puertos del Estado haya actuado de forma unilateral y no respetando las bases de diálogo que, semanas atrás, habían fijado Ana Pastor y José Llorca en una reunión con los representantes sindicales.
El supuesto aplazamiento de la reunión –que no es tal, por cuanto estaba prevista para el jueves desde la semana pasada- permitirá a todas las partes abordarla con documentación negociada sobre la mesa. La ministra, que estos días está presente en el Debate sobre el Estado de la Nación, tendrá pues tiempo suficiente para plantear las alternativas que baraja el ejecutivo y que podrían pasar por la adopción de medidas transitorias hasta que finalice la legislatura.
Este último punto, en caso de concretarse, será difícilmente aceptado por los trabajadores, que verían una vez más dilatado en el tiempo la resolución de un asunto capital para ellos y que podría suponer un futuro incierto en cuanto a las garantías de estabilidad en los empleos. De hecho, de ser así, el único ganador sería el propio Gobierno que podría ver ampliado el plazo de negociación sin interferencias en las próximas citas electorales.