La comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de la Cámara Baja examinará el proyecto legislativo -la última iniciativa de calado del exministro del ramo, Miguel Arias Cañete-, que incluye cambios en las leyes pesqueras, para adaptarlas a las normas de la Unión Europea (UE).
Una vez votada la reforma pasará al Senado; si esta cámara presenta enmiendas, volverá de nuevo al Congreso.
Entre los capítulos del proyecto del Gobierno para revisar la regulación pesquera, destaca un incremento de la cuantía de las multas, hasta llegar, en el caso de infracciones muy graves, a penalizaciones desde 60.000 a 600.000 euros.
También pretende potenciar la diversificación y actividades como el turismo marinero.
La revisión está enmarcada dentro del llamado “carné por puntos” para pesca, que funciona de manera inversa al del tráfico por carretera, porque el armador o el barco infractor los recibe y llegado a un tope se le puede quitar la licencia; también recoge especificidades para buques de recreo.
Entre las modificaciones presentadas por los partidos, el PP planteó la posibilidad de regular la comercialización de los productos pesqueros, obtenidos mediante las actividades de “pesca-turismo”.
Otro cambio propuesto por el PP supone incrementar los requisitos para reducir sanciones a quienes se acojan al “pago voluntario” por infracciones que tengan un valor máximo de 15.000 euros.