Fue el 30 de marzo del 2005 -hace ya casi ocho años- cuando la Armada dio de baja la fragata Baleares. Desde ese momento y hasta la actualidad el Arsenal de Ferrol ha dado cobijo en sus dependencias y en Navantia a otros siete buques de guerra de la Marina española, algunos de ellos ya carcomidos por el óxido. El último en incorporarse al listado ha sido el portaviones Príncipe de Asturias.
El Arsenal de Ferrol suma ocho unidades de baja y prepara la venta de cuatro
LA VOZ DE GALICIA, 24 Feb. (Ferrol).- En todo ese tiempo, no se ha producido todavía ninguna venta. Ahora, no obstante, los recortes presupuestarios del Ministerio de Defensa van a provocar que se aceleren esos procesos.
Así, fuentes oficiales de la Armada señalan que se están ultimando los pliegos técnicos correspondientes para sacar las pujas que permitan desguazar la mencionada fragata Baleares y los patrulleros de la clase Anaga Bergantín, Mouro y Marola.
Estas tres últimas unidades engrosaba una serie de diez patrulleros diseñados para la vigilancia de costas, pesca y salvamento. Cada navío lleva el nombre de un islote español. Están siendo sustituidos de forma progresiva por los nuevos Buques de Acción Marítima (BAM).
El mismo fin les aguarda al patrullero Chilreu y al portaviones Príncipe de Asturias, aunque en estos dos casos todavía se encuentran en la fase de desarme para poder acometer posteriormente el desguace.
Procesos largos
Los procesos desde que un buque es dado de baja en la Armada hasta que es subastado son, habitualmente, largos. El ejemplo más claro es el de la Baleares, dada de baja en el 2005 y aún acumulando óxido.
De la celeridad, no obstante, que ahora pretende imprimir la Armada a estos procesos es que se estén preparando las subastas de los tres patrulleros de la clase Anaga, que fueron dados de baja en el transcurso del 2010.
¿Y los barcos nuevos? El último en llegar al Arsenal fue el buque de aprovisionamiento en combate Cantabria, en verano del 2010. La siguiente en incorporarse será la fragata más moderna de la Armada española, la F-105, aunque todavía carece de fecha oficial para ello.