Los astilleros ya no podrán recibir ayudas por cierre a partir del próximo mes de enero, según ha dictado la Comisión Europea (CE), que ha modificado el marco aplicable de las subvenciones estatales a la construcción naval. Estas ayudas se destinaban a sufragar los costes resultantes del cierre total o parcial de los astilleros, así como de las indemnizaciones a los trabajadores despedidos o jubilados anticipadamente. Los sindicatos avisan de que esta nueva prohibición agravará todavía más la situación de la construcción naval en España, ya que muchas atarazanas privadas están inmersas en procesos concursales y podrían entrar en liquidación.
Afecta a las partidas destinadas a indemnizar despidos y sufragar costes de consultoría y reciclaje de las instalaciones
Faro de Vigo, 16 de diciembre (Vigo). Desde 2003 y hasta el próximo 31 de diciembre, las subvenciones estatales a la construcción y reparación naval estaban permitidas por la CE si se trataba de ayudas al cierre, a la investigación, desarrollo e innovación; a la creación de empleo, al desarrollo, créditos a la exportación o ayudas regionales. Pero a partir del próximo 1 de enero y durante un plazo máximo de dos años, Bruselas solo permitirá las ayudas a la innovación, las regionales y los créditos a la exportación; el resto, serán consideradas subvenciones ilegales.
El objetivo de Bruselas, según anunció la semana pasada el propio vicepresidente de la Comisión, el español Joaquín Almunia, es que a partir de 2013 se suprima el régimen específico que facilita las subvenciones al naval. Los sindicatos ven con especial preocupación la supresión de las ayudas al cierre de astilleros, dada la situación actual del sector en España.
Hasta ahora, los Estados podían conceder subvenciones para sufragar parte de los costes derivados del cierre de las atarazanas, incluyendo indemnizaciones a las plantillas, servicios de consultoría para los trabajadores, formación o adaptación de las instalaciones para otras actividades ajenas a la construcción o reparación naval. "Este problema puede ser tan o más importante que el bloqueo al tax lease", resume Manuel García, secretario general de MCA-UGT en Galicia.
Solo en la ría de Vigo hay dos grandes astilleros en proceso concursal (Barreras y Vulcano) que, si no llegan a un acuerdo con sus acreedores y entran en fase de liquidación, ya no tendrían derecho a estas ayudas a partir del próximo 1 de enero.
Bruselas sí accedió a mantener las ayudas a la innovación (tanto en construcción como en reparación naval), que podrán cubrir hasta un 30% de los costes. "Es esencial impulsar la innovación en la construcción naval para favorecer la competitividad de esta industria. Las nuevas reglas contribuirán al mantenimiento en Europa de una construcción naval especializada, competitiva e innovadora", indicó Almunia a través de un comunicado.
La revisión de las normas amplió además el campo de aplicación con el fin de cubrir también los buques de navegación interior y las estructuras flotantes y móviles en el mar (por ejemplo, plataformas off-shore o torres eólicas), y define de forma más precisa las reglas para las ayudas a la innovación.
Otros casos
Las normas sobre créditos a la exportación (facilidades crediticias concedidas por el Estado a los armadores o terceros para construir o reparar un buque) y sobre ayudas con finalidad regional se mantienen sin cambios. En cuanto a estas últimas (que se revisarán en 2013), se podrán conceder siempre y cuando vayan dirigidas a la mejora y modernización de los astilleros ya existentes y no estén vinculadas a una reestructuración financiera de las empresas.